Clasificar es posible

En un Estadio Ciudad de Río Cuarto que se presentó en su máxino esplendor, totalmente repleto, Estudiantes de Río Cuarto ganó un partido clave y definitorio para enterrar los fantasmas del descenso. Derrotó 2 a 0 a Villa Mitre de Bahía Blanca y hundió de esta manera a su rival en la zona roja de los promedios, al mismo tiempo que salió a flote y se encamina a la clasificación por un lugar en el pentagonal final.

Los goles «celestes» fueron marcados por Nicolás Gatto, el nuevo líder de la tabla de goleadores.
Este cuatrimestre ah demostrado que el equipo de Hugo Mattea alcanzó la madurez necesaria para hacer valer el buen material con el que cuenta su técnico, más claro está, las dos excelentes incorporaciones que el club realizó: Luis Perez Araya y Nicolás Alberto Gatto, ambos las figuras del triunfo de este jueves santo.

El partido contra los bahienses era clave, más que bisagra era definitorio. Y así lo entendió Estudiantes, más allá que en un principio el trámite del encuentro se presentó chato, sin lugar al buen juego. Claro está, el rival en cancha era un necesitado de sumar puntos. Villa Mitre arrancó con un 4-4-2 que con el correr de los minutos se convirtió en un 5-3-2 al retrasar a Fernandez, su volante por izquierda.

Corrían ’39 minutos de juego y sólo se habían ocasionado unas pocas situaciones de gol y fue ahí cuando Aimar se escapó de sus marcas por primera vez en el partido. El enganche le puso un exquisito pase entre líneas a Gatto para que el puntano quedara mano a mano con el arquero, que dudó en salir e intentó distraer al delantero reclamando un offside inexistente pero fue en vano, Gatto levantó la mirada y lo fusiló a sangre fría para asegurar la apertura del marcador. Otra vez el ex Atenas apareciendo en los momentos claves.

Estudiantes terminó mucho mejor este primer tiempo, inflado por el envión anímico del gol. Comenzó a jugar con el nerviosismo visitante que había quedado desconcertado. Una pincelada de Aimar y la contundencia de Gatto le daban el triunfo transitorio al «celeste» en un partido que se apagaba en cero.

Para los segundo 45 minutos Villa Mitre armó nuevamente un 4-4-2 y salió a presionar al local. En tan sólo ‘3 le ocasionó dos llegadas de gol que fueron perfectamente contenidas por la gigantesca figura de José Mancinelli con una doble atajada.

A los ‘6 Rodirguez combinó con Chiaretta por izquierda y el volante metió un centro medido y a la cabeza de Alexis Salazar que en el punto del penal y con un gran gesto técnico, clavó un cabezaso cruzado que dió en el palo y al rebote lo tomó quién más si no Nicolás Gatto que reventó la red para conventirse en el nuevo máximo artillero de este certamen y estirar la ventaja a dos. Ahora si llegó la tranquilidad para hacer y disponer del segundo tiempo a su gusto. De acá hasta el pitido final, Estudiantes manejó el ritmo y principalmente la pelota. Los centrales: Reartes y Morsino se mostraron seguros en una parada muy dificil y el mediocampo con Perez Araya a la cabeza fue lo mejor del local.

Una sola baja para los «celestes» y fue la expulsión de Franco Chiaretta por una supuesta provocación del exquisito volante a Escudero que le propinó un golpe de puño. Por lo que el arbitro Truco decidió amonestar a Chiareta, consecuentemente expulsado por doble amarilla y roja directa para el bahiense. Los de la Avenida España acumulan 6 partidos sin perder y 3 victorias consecutivas y suman 23 puntos, mantienen el tercer lugar en la tabla de posiciones y por ahora se clasifican al pentagonal final cuando restan sólo 3 fechas. Están a 2 unidades de Huracán (TA) y le llevan 6 puntos de distancia al cuarto.

El descenso quedó atrás, muy atrás. Y la clasificación está a la vuelta de la esquina. El próximo partido de Estudiantes es en Río Negro, ante Cipolletti.

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