El jugador de Juventud Unidad de Río Cuarto acordó su llegada al fútbol mexicano y si bien resta definirse en cual de las dos instituciones que se mostraron interesadas en sus servicios recaerá, ya tiene los pasajes para volar el próximo 3 de junio a tierras aztecas.
Puntal dialogó con Bruno para conocer los detalles de esta gran noticia.
– ¿Cómo tomó esta confirmación sobre su pase al fútbol mexicano?
– Hace un tiempo que veníamos en tratativas y la verdad es que ahora que se concretó estoy muy feliz porque es algo que quise hacer desde que era muy chico, poder jugar en el exterior.
– ¿Quiénes hicieron los contactos para que llegara esta gran posibilidad?
– Esto se dio gracias al trabajo de Mario Paniego y a mi papá (Julio Titarelli). Ellos son los que hicieron los contactos para que yo tenga esta oportunidad.
– Hay dos equipos interesados, entre los que se definirá su futuro.
– Las posibilidades son Puebla, donde me sumaría al equipos Sub-20 o Los Potros de la UAEM, conjunto que perdió el sábado a la noche la final por el ascenso, por lo que la temporada que viene volverá a jugar en la segunda categoría, en este caso llegaría al equipo de primera.
– ¿Lo tomó por sorpresa esta posibilidad o era algo que ya tenía en mente?
– A comienzo de la temporada Mario Paniego me había conseguido la posibilidad de viajar a Italia para jugar en el ascenso, pero después no se pudo dar por problemas de la ciudadanía. Ahí Mario habló con sus contactos en México, les mandamos unos videos míos, les gustaron y en dos semanas nos confirmaron estas dos opciones.
– Le llega este pase en un muy buen momento personal y de su equipo…
– Este año hicimos bien las cosas y eso es algo que voy a extrañar mucho. Tengo mucha confianza que me dan mis compañeros y eso se nota dentro de la cancha.
– ¿Va a ser difícil dejar un grupo en el club con el que consiguieron tantas cosas?
– Sin dudas. Cuando me tocó subir a primera me encontré con personas de experiencia que me ayudaron mucho y eso es lo que voy a extrañar. No es fácil manejar el hecho de tener de compañero al hijo del entrenador y eso me costó bastante en el comienzo, pero siempre el grupo estuvo a mi lado para apoyarme.
– En el ámbito personal debe ser una satisfacción muy grande poder ver retribuido tanto esfuerzo de esta manera…
– Este es un año personal para mí. Yo hablé con mi familia para tomarme un paréntesis en mis estudios de kinesiología y de esta manera poder dedicarme de lleno al fútbol. Ellos me apoyaron y por eso también son una parte muy importante de lo que me está pasando.
– Va a un torneo que es verdaderamente competitivo…
– Sin dudas. Lo que más me va a costar más va a ser el clima y la altura.
– ¿Cómo piensa que manejará el hecho de tener que estar tan lejos de sus afectos y su cuidad?
– Seguramente voy a extrañar, pero yo se muy bien lo que quiero y eso es jugar el fútbol. Ese es mi objetivo y no me voy a salir de esa idea.
Fuente Puntal