Con sinsabores pasaron los partidos de ida del primer play offs para los cuatro representantes de la Liga Regional de Fútbol de Río Cuarto que siguen en carrera en la presente edición del Torneo del Interior.
Tras los primeros noventa minutos, hay dos que esperan tranquilos y con el pasaporte a las semifinales prácticamente garantizado. Otros, en cambio, la tienen complicada en su afán de seguir en carrera por un ascenso al Torneo Argentino B.
LO QUE DEJÓ LA PASADA FECHA
Atenas fue el primero en salir al ruedo, el viernes a la noche. El Brujas, uno de los tantos equipos ignotos que forman parte de este campeonato relámpago, era el rival de turno. Por la Avenida Marconi había confianza pero cautela a la vez. No iba a ser cosa que esos muchachos vestidos como camiseta negra dieran la sorpresa o algo por el estilo.
Claro que nada de ello ocurrió. Sin brillar, el «albo» no tuvo mayores complicaciones para golear a lo más parecido a un rejuntado que a un equipo de fútbol. No se trata de desmerecer al rival, pero es indudable que no hubo equivalencias entre uno y otro a lo largo de los noventa minutos.
Un arquero que le hizo honor a su apellido (Sombra) y una defensa que hacía agua por todos lados fue suficiente para que Atenas, en un rato de inspiración, sacara cuatro goles de diferencia y dejara la serie prácticamente liquidada.
Un día después, el sábado, llegó el turno de Juventud Unida, a la postre el que peor la pasó de los «ligueros». El equipo de Julio Titarelli se topó con un rival de fuste que no por casualidad llegaba a este compromiso habiendo obtenido puntaje ideal en la fase clasificatoria (cuatro jugados cuatro ganados, con quince goles a favor y sólo uno en contra).
Colón de Colonia Caroya fue demasiado para el elenco riocuartense. Categórica victoria por 3 a 0 para quedar a un pasito de la clasificación a las semifinales. ¿Podrá la «Juve» lograr la hazaña? Sin dudas que será una misión prácticamente imposible, mucho más teniendo en cuenta que esa diferencia de tres goles, por lo que mostró uno y otro a lo largo del partido, podría haber sido aún mayor.
Y el domingo, también con sinsabores, llegó el momento de la presentación de Ateneo Vecinos por un lado y de San Martín, por el otro. Uno de visitante, el otro de local. Uno que ganó y el otro que perdió.
El «tricolor» dejó en claro que en sus planes figura el de pelear por el ascenso y así lo demostró en la localidad de Malagueño, donde Sportivo Brasil, equipo oriundo de Carlos Paz, hizo las veces de local.
Un doblete de Maximiliano Foggia fue suficiente para conseguir una diferencia que parece decisiva si se tiene en cuenta que la revancha se jugará en General Cabrera, un reducto donde los dirigidos por Carlos Rosané representan un hueso duro de roer.
Distinta suerte corrió el «patriota» de Vicuña Mackenna. Se topó con su homónimo de Merlo, rival que, con la poca información que se puede obtener de muchos de los equipos que forman parte del Torneo del Interior, se destacaba por contar en su plantel con el experimentado Aldo Paredes, de gran recuerdo en San Lorenzo y también con un paso por Boca en el momento cumbre de su carrera.
Y fue el conjunto de San Luis el que hizo una pequeña diferencia. Victoria 1 a 0 y la posibilidad de definir el pasaporte a las semifinales ante su gente. Para San Martín, claro está, no todo está perdido, y más con los buenos antecedentes que registra el equipo de Jorge Garoni cada vez que juega de visitante, donde no conoce lo que es perder en el presente campeonato.
Así pasaron los partidos de ida para los cuatro «ligueros». Dos, Atenas y Ateneo, consiguieron sendas victorias que los dejaron ahí de las semifinales, instancia que de arribar los tendrá frente a frente. San Martín perdió pero sigue con vida, mientras que Juventud Unida se aferra a lo más parecido a un milagro para dar vuelta la historia. El domingo se conocerá cuál será el desenlace.